¿Por qué hacer un proceso de coaching?
Son diversos los beneficios de un proceso de coaching. Además del objetivo que el cochee establezca, existen resultados inherentes al proceso mismo, que los podemos plasmar así:
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La persona comienza a verse de otra manera.
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Se acepta tal como es, con el ánimo de mejorar día a día.
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Siente mayor confianza en sí mismo.
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Sus percepciones son más flexibles.
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Adopta objetivos más realistas.
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Su comportamiento es más maduro.
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Prescinde de conductas dañinas, para sí mismo o para otros.
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Es capaz de aceptar a los demás como son.
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Aprende a diseñar y vivir sus decisiones.
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Adquiere hábitos positivos que no poseía.
En resumen:
Al concluir un proceso de Coaching se espera que el cliente posea:
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Una visión más amplia de su realidad y de sus posibilidades.
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Una actitud distinta hacia sí mismo, los demás y hacia la vida en general.
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Más capacidad de aprender.
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Comportamientos nuevos, más apropiados.
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Un estilo de trabajar y vivir más satisfactorio.